2020-07-06 22:00:31
Alba Cobos
Gurú Purnima es un festival de origen indio, celebrado por los hindúes, budistas y jainistas. En este festival se rinde respeto y homenaje a los guías espirituales o a los maestros. Una tradición muy enraizada en la cultura india, ya que tradicionalmente se considera a los maestros y gurús a la par con los padres.
Es el gurú quien muestra un camino hacia la verdad,
hacia el propio conocimiento y hacia la consciencia universal. El gurú, llamado
por la curiosidad, guiado por su afán de preguntar y conseguir respuestas y a
través de la propia experimentación, haya la luz de la verdad que, desterrando
la oscuridad de las limitaciones de la mente, da entendimiento a el mundo que
le rodea y a si mismo. No es sino desde la gratitud, humildad y compasión que
se dirige a sus discípulos o estudiantes, no para enseñarles el camino a
recorrer sino para mostrar que hay caminos que pueden elegir para encontrar la
verdad. Los gurús no dan todo hecho, como un manual de instrucciones, sino que
te ayudan a nutrirte y prepararte para que tu mismo veas las posibles
direcciones que puedes tomar.
El deber del gurú no sólo se observa en la cultura
india, sino que en muchos textos clásicos europeos se enseña la importancia de
ir en busca de la verdad y tratar de abrir los ojos de los otros para que así
también la vean.
El mito de la caverna de Platón es una alegoría de las
personas que buscan y encuentran la verdad. En una cuerva, se encuentran unos
prisioneros que viven ahí desde su nacimiento. Acostumbrados a ver la sombra de
los objectos del mundo fuera de la cueva, creen que la realidad de los objetos
del mundo son las sombras que ellos ven en las paredes de la cueva. Los
prisioneros representan aquellas personas ignorantes que no se cultivan, que
dan por sentada su realidad y creen que esa es la única manera posible de percibirla.
Estos no sólo se sienten cómodos en la ignorancia, sino que se muestran
hostiles hacia aquellas personas que muestran o señalan otras perspectivas.
Cuando un prisionero se escapa y ve el mundo exterior, se da cuenta de que lo
que la gente percibe dentro de la cueva es sólo un espejismo de la realidad.
Aunque sabe que los demás no le creerán, es su deber volver a los suyos y
explicar lo que ha aprendido, a pesar de que le tomen por loco.
Como en el mito de la caverna de Platón, el gurú o el que encuentra la verdad, tiene el deber de regresar a los otros encerrados en su propia percepción de la realidad y mostrar la luz de la verdad.